“Me interesa todo aquello que, de la historia, nos deja una transmisión rica y fecunda como para seguir profundizando y transformando nuestra clínica; pero me preocupan aquellos elementos de la historia que, congelados en el tiempo, uno encuentra operando en el presente, vaciados y desvinculados del marco en el que alguna vez cumplieron alguna función necesaria. (…) En los albores, para sistematizar y ordenar los datos ofrecidos por las distintas disciplinas, para formar a nuevos profesionales en lo que es elemental saber en relación a los bebés, se armaron los cuadros de desarrollo y maduración en cada una de las áreas que hoy circulan por todas partes. Elementos congelados de la historia son esos mismos cuadros hoy día tomados no como parte de lo que el profesional debe conocer ampliamente para sus adentros, sino convertidos en las pautas que el bebé debe ir cumpliendo para avanzar, convertidos en los objetivos a alcanzar a lo largo del tratamiento. (…) No era para esto que la Dra. Coriat elaboró los mencionados cuadros”.
Extracto del texto “Tres décadas en Estimulación Temprana”
Elsa Coriat (1992)