INTRODUCCIÓN

El IRDI es un instrumento que fue construido con el objetivo de facilitar la detección, especialmente en la consulta pediátrica de acompañamiento del niño durante los primeros 18 meses de vida, de riesgo para su desarrollo psíquico, y sus resultados permitieron verificar que un conjunto determinado de 14 síntomas psíquicos, cuando se presentan durante el tercer y cuarto año de vida , – independientemente de que se presenten en conjunto o individualmente – permiten concluir que ese niño se encuentra en riesgo psíquico estructural (por tal razón es que los denominamos síntomas conclusivos).

La investigación que permitió su validación se desdobló en centros hospitalarios y de atención a la población urbana de las más diversas regiones del Brasil, de manera que esta moldeado (modelado ¿) de acuerdo con las características propias de las personas que acuden habitualmente a los hospitales públicos y a los puestos de salud. Su aplicación es rápida y totalmente compatible con la consulta pediátrica habitual, no requiriendo instrumental específico, sino solamente las hojas de registro que, incorporadas a la historia del paciente, permitirán, en las sucesivas consultas de seguimiento de la salud del niño, registrar la repetición de la ausencia de los indicadores de condiciones favorables para su desarrollo. La repetición de dos ausencias de indicadores durante los 18 meses en que el acompañamiento habitualmente ocurre, ausencias sucesivas correspondientes a los intervalos de edades en que se dividen cronológicamente los indicadores (o sea, no coincidentes en el mismo intervalo, pero sí en intervalos sucesivos) justifica la presunción de riesgo y la consecuente derivación (el consecuente direccionamiento) para orientación, estimulación y/o terapia en el área psicológica.

En el anexo de este Capítulo adjuntamos las planillas de registro en el campo epidemiológico, de los indicadores de riesgo, y una hoja general de registro de los niños que reciban la aplicación de este protocolo, de manera de facilitar el relevamiento de la proporción de la población infantil acompañada de este modo.

A continuación se ofrecen los fundamentos teóricos y conceptuales de este instrumento, y el desarrollo, descripción del campo de aplicación y los resultados de la investigación realizada durante nueve años, y también, en anexo, las tablas de registro para su aplicación en la práctica clínica habitual de la consulta pediátrica y/o de evaluación del desarrollo.

Consideraciones sobre Investigación y Psicoanálisis.

Si en un comienzo, la ciencia moderna aposto a una supuesta identidad entre lo visible y lo verdadero, hoy, la mayor parte de los conocimientos científicos que apoyan las tecnologías más avanzadas de nuestro tempo, giran en torno de objetos no visibles, meramente deducibles. El hecho de que el psicoanálisis trabaje con objetos no visibles, estando más preocupado con la “falla de cálculo” que con los aciertos, no puede justificar la acusación de ser “no científico”. Si el psicoanálisis es una práctica fundamentada en una lógica, si define su objetivo (aun cuando lo haga por la negativa) y si articula operaciones de transformación y/o de cálculo (no numérico) del grado de indeterminación (recordemos que los matemáticos trabajan en el desarrollo de la lógica de las transformaciones de lo aleatorio), de hecho, el psicoanálisis está cumpliendo todas las condiciones fundamentales de lo que se llama ciencia.

Por eso es legítimo que el Psicoanálisis, aun cuando se oriente por una metodología singular, diferente al común de las ciencias modernas, pueda también valerse de los instrumentos de prueba, control, verificación y cálculo que la ciencia contemporánea utiliza. Los descubrimientos ocurridos en las últimas décadas relativos a la neurotransmisión y la neuroplasticidad cerebral otorgaron un fundamento indiscutible a las tesis psicoanalíticas sobre el valor estructurante de las experiencias infantiles de los primeros tiempos de la vida.
Para Lacan, las experiencias infantiles se estructuran como inscripciones, ya que ellas tienen el valor de letras en un texto (el texto del romance familiar). He aquí la razón por la cual el inconsciente está estructurado como un lenguaje y, por que responde de modo tan sensible al campo de la palabra.

El cerne de esta investigación registra si son cumplidos o no los intercambios entre la madre y el hijo, las transformaciones necesarias para la construcción de un sujeto capaz de desdoblar sus habilidades en relación con el mundo y sus semejantes. Ese es el trabajo. Ese es el trabajo que los padres de un bebe realizan. Una investigación sobre indicadores de riesgo en el plano psíquico y en el desarrollo, precisa situar esos indicadores principalmente en el campo de la relación madre-hijo – campo en el que se opera la transmisión de las significaciones de los sujetos, de las personas y del mundo circundante, y en el cual el bebe precisará situarse como sujeto.

El estudio

La Investigación Multicéntrica de Indicadores Clínicos de Riesgo para el Desarrollo Infantil, tratada aquí, se inició en 2000 con la constitución del Grupo Nacional de Pesquisa. Los 250 investigadores involucrados pretendían someter a la prueba de sensibilidad, un protocolo de Indicadores de Riesgo del Desarrollo Infantil, con la intención de enfatizar los aspectos psíquicos. Inicialmente fueron más de 40 indicadores, pero el protocolo experimental final fue compuesto por 31, que acompañan los primeros 18 meses de vida de un bebe. Dirigidos a cada momento del desarrollo del niño, fueron agrupados de acuerdo con las siguientes fajas de edad: de 0 a 4 meses, de 4 a 8 meses, de 8 a 12 meses y de 12 a 18 meses. Para garantizar la calidad de la investigación, los diferentes profesionales participantes recibieron entrenamientos específicos.

En términos de prevención es necesario anticipar que cualquier indicador relativo a la garantía de la salud mental y al desarrollo normal de un niño está sometido a las vicisitudes de la lógica de la imprevisibilidad de los acontecimientos histórico-sociales y familiares. Es importante hacer esta salvedad, porque se trata de una variable interviniente de fuerte incidencia en investigaciones como esta. La prevención es siempre una propuesta de realización futura, en que el nivel de eficacia está condicionado a una alta correlación causa-efecto relativa a los fenómenos, que se pretende evitar, anular o controlar. Por lo tanto, se espera que la operación sobre las causas haya provocado una segura y direccionada modificación de los efectos.

La propuesta del estudio es que los Indicadores Clínicos de Riesgo para el Desarrollo Infantil (IRDI) – formulados a partir de la teoría psicoanalítica de orientación lacaniana, winnicottiana y de la experiencia clínica – sean empleados por la pediatría, durante las consultas en los centros de salud, para detectar precozmente trastornos psíquicos del desarrollo infantil.

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